lunes, 23 de noviembre de 2009

Reynaldo

A nuestros ojos adolescentes aquel joven era un viejo
Escribía en el Diario "Juventud Rebelde"
Era muy flaco y trigueño, hablaba con un marcado acento de la parte oriental de Cuba
Trataba de conquistar a una amiga de nuestro grupo
Le decía cosas, le escribía poesía
Un día le dijo delante de todos que veía palomas en sus ojos
a todos nos pareció ridículo
nunca le creímos del todo esas "cosas de antes", esa postura de caballero
Solo veíamos una pose para enamorar a la bellísima DAyer lo vi en Youtube 30 años después
Había retado a duelo cívico al que golpeó a su mujer
Lo espero en una esquina de la Ciudad
La cobardía asistió al reto multiplicada
Le quite el audio al video
Se muy bien que lo peor son los gritos y no los golpes

domingo, 15 de noviembre de 2009

derechos de autor

En Cuba casi todo lleva el nombre de un "mártir" de la revolución: carreteras, fabricas, jornadas ideológicas, parques.
Mi escuela se llamaba Marcelo Salado y teníamos que componer dos paginas sobre ese mártir al que ya no recuerdo.
Yo tenia 9 o tal vez 10 años.
El Director de la escuela se llamaba Compañero Luciano, todos respetábamos a aquel hombre ya viejo con acento castizo que tenia una cicatriz en la frente de tanto pensar.
Me llamaron a La Oficina y aquel imponente caballero cerró la puerta y se sentó frente a mí.
Por unos instantes me miró fijamente mientras se apretaba la piel de la frente con el índice.
"Su composición, por mucho, ha sido la mejor" (movía las dos manos lentamente, recuerdo todos los gestos aunque no exactamente las palabras)
"Usted sabe que su compañero de aula E.. es sobrino del mártir cuyo nombre lleva nuestro Centro"
(recuerdo con claridad las pausas y el tratamiento de Usted)
"Quizá no lo entienda hoy pero créame, sería mucho mas efectivo si el sobrino del mártir gana el Concurso"
"Hay secretos necesarios"
"hay causas por las que valen la pena mentir"

El autor premiado leyó mi composición frente a toda la escuela en un acto solemne.
Mientras aplaudíamos busque sin éxito una mirada del Director.
Mierda, pensé entonces, aunque no recuerdo las palabras exactas.

domingo, 1 de noviembre de 2009

En el fondo


Siento una relación especial con el mar
Al mar de mirar y al de nadar los prefiero con olas y espuma
Para navegar prefiero un mar tranquilo.
Por muchos años no podía controlar el deseo de meterme en el agua hasta varias veces al día, estar en el fondo tanto tiempo como pudiera.
MM, otra amiga ahora perdida, se asusto un día cuando me vio en el fondo riéndome como un loco agarrado a los corales
Entonces no le creí, solo había bajado como siempre hacía, disfrutando el silencio y las luces raras
Pero quién sabe si pasa a veces que el tiempo se detiene y vivimos otra vida que después no recordamos como cuando se sueña.
Quién sabe si MM con su careta no me vio a mí sino a mi cuerpo abandonado por unos instantes, un traje vacio riendo sin sonido o llorando sin sentido ni control, mientras yo estaba en otros lugares, sin el beneficio del recuerdo.